Perfil Paciente Inmunomet
En Inmunomet el perfil de paciente que suele llegar viene después de años con molestias digestivas y otros síntomas físicos que en la mayoría de los casos son limitantes para hacer una vida normal. Han hecho un largo recorrido algunas veces desde pequeños, es decir que llevan 20 años con malestar y 10 en la búsqueda de soluciones y casi todos han pasado por diferentes médicos y especialistas que en ocasiones dan con algún diagnóstico concreto pero no han tratado de forma integral su problema.
A continuación, intentaré resumir las situaciones que he observado con más frecuencia contando con que me deje muchas ya que cada caso es único y su historia también lo es:
- Antecedentes familiares que también lo padecen y lo han normalizado. “Mi madre y mis tías siempre estuvieron mal del estómago”.
- Cuadro de síntomas muy concreto y que sólo tiene esa persona.
- A veces lo tiene el/ella y sus hijos, “creo que mi hija /o está mostrando síntomas, no tolera la leche, tiene pinchazos y molestias, diarreas, etc”.
- En muchos casos acuden con una historia vital que se acompaña de una situación social, personal y familiar compleja y difícil en la que puede o no haber trauma, pero “cargan” con ellas.
En ese contexto son personas que suelen venir con altas dosis de desconfianza respecto a que esta vez “den con lo que les pasa” y también enfadadas consigo mismas y con los demás por su malestar físico y emocional constante. Por fortuna la gran mayoría perseveran y son constantes en la búsqueda de soluciones, normalmente han leído y tratado sobre el tema y a veces tienen información coherente y otras informaciones confusas y algún diagnóstico previo como celiaquía o ciertas intolerancias alimentarias. Con todo y con eso no lo quieren ni pueden dejar pasar pues sus síntomas son tan agudos y molestos que en muchas ocasiones les impiden hacer una vida “normal”.
Cito algunos ejemplos reales:
- Miedo a montar en un transporte porque no saben si en el trayecto aguantaran sin ir al baño.
- Ventosidades incontroladas.
- Estar en una reunión de trabajo y estar siempre informados y alerta por saber dónde están los servicios o “la salida más rápida”.
- Hacer una comida de trabajo o con amigos se convierte en algo incómodo y desagradable porque no saben en qué momento algo les sentará mal y tendrán que irse o no comen por miedo al malestar y en muchos casos dejan de asistir o lo evitan.
El tratamiento después de la evaluación y diagnóstico completo exige tres vías de intervención
- Médica: pruebas, medicación y seguimiento.
- Nutricional: adaptación de su dieta a sus intolerancias y diagnóstico para conseguir una futura mejora de sus síntomas.
- Psicológica: el malestar emocional agudiza y mantiene los síntomas.
El perfil psicológico y los rasgos de la personalidad que más nos encontramos
- Exigente: “no puedes cometer fallos”.
- Perfeccionista.
- Pensamiento anticipatorio en exceso, “ojo como te siente mal esto, ya verás. ciclo cuerpo en alerta y se acabó. Sudores fríos y me descompongo”.
- Introvertidos: “me lo como todo yo solo, no quiero preocupar a mi mujer”.
Su situación actual:
Frustrados por un ambiente social que no entiende lo que le pasa, “como vas a no poder comer esto con lo sano que es…” Su historia:
- Con infancias hiperexigentes :”cuidaba a mi madre enferma , a mis hermanos pequeños,etc.”
- Infancias superprotectoras : “cuidado con esto, no cojas, no hagas…”
- Trauma infantil.
- Acoso escolar o laboral.
- Personas que llevan todo el peso familiar.
¿Por qué un psicólogo? ¿Por qué psicólogo especializado en disbiosis e intolerancias alimentarias?
No es raro que con este escenario las personas tengan altas dosis de cortisol en sangre, estrés mantenido en el tiempo y su ánimo no sea el mejor puesto pues están hartos de sentir molestias o dolor constante y hacer una dieta restrictiva que en muchos casos les cambia su vida social y personal.
Expectativas del paciente; la curación, “estoy con esto un año y si no me encuentro como ante eso puedo comer de todo lo dejo”.
Expectativas realistas: no es curación, es mejoría y estabilidad. No es lo que es sino como lo ves. El psicólogo de Inmunomet conoce el calvario y el sufrimiento mantenido durante años, aceptar el dolor pero no el sufrimiento es lo que buscamos.
Como intervenimos con el paciente
- Reestructuración cognitiva: reconducimos el pensamiento a otros más adecuados a la realidad del paciente.
- Manejo de la ansiedad y estrés. ¿Qué es y como soy yo cuando tengo ansiedad?, qué le viene mal y bien a mi ansiedad.
- Gestión de las emociones.
- Conocimiento de los síntomas físicos, precipitantes del estrés e interacción de los diferentes diagnósticos en sus síntomas depresivos y estado de ánimo.
- Empoderar y priorizar al paciente: “explico a los demás mi problema si no lo entienden o no lo ven lo importante es cómo me encuentro yo”.
Frases y comentarios de pacientes después de 6 meses en terapia
- Encontrarte bien ayuda muchísimo.
- Gestiono el hacer las cosas de otra manera.
- Cambios a los que me tengo que adaptar: “me encanta viajar y me toca. llevarme mi pack de alimentos.”
Y aquí es donde llegan a Inmunomet
1ª Revisión exhaustiva: el médico les hace muchas preguntas, todo es información, de su historia, pruebas, recorrido, síntomas y situación vital. A continuación, mandan muchas pruebas y test, en ocasiones ya las tienen y en otras hay que repetirlas, muchas de ellas son nuevas.
2ª Una vez que se tienen los resultaos el médico ya puede integrar y deducir una propuesta de tratamiento que va en tres sentidos:
- Médico.
- Nutricional.
- Emocional.
